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La Razón

 La Razón  Aún estoy buscando la razón de ser y estar, algo tan trillado de lo que se ha escrito infinidades de veces. A su vez, el simple hecho de existir te cuestiona y te golpea incesantemente.  La razón aún la estoy buscando, como muchos otros que se sienten perdidos o creen haberla encontrado, pero aún así siempre quedará una hendidura por donde entrará la duda. Y nuevamente se instalará cómodamente, haciendo lo que ella más sabe hacer; confrontándonos con nosotros mismos y nuestra manera de existir y sentir.  Perderse nunca ha sido una buena opción, ¿o si? Perderse quizás con un hilo amarrado a ti que te guíe de vuelta con determinación de haber encontrado algunas respuestas.  Repetir incansablemente patrones, o situaciones de las cuales muchas veces son necesarias para evolucionar, pero, ¿evolucionar hacia dónde? Si se habla de evolución, es certero que se va hacia adelante, pero no todo el tiempo es bueno avanzar; ¿y si hay un abismo? ¿Un despeñadero? Ha...

El Túnel en blanco y negro

     Como si de una película se tratara, me vi sumergido en mi propio pensamiento. Resultaba algo confuso; pero, a la vez bastante nítido y artístico; al menos, esa es la sensación que tenía. A veces parecía que me encontraba en un largo pasillo de un estacionamiento, donde el techo que me seguía, o que yo perseguía, dejaba ver la luz y la propia forma que se dibujaba de una manera muy geométrica. Fue como ver dos pasillos en relieve, las sombras estaban ahí para demostrar que ellas tenían mucho que aportar.       Las luces se repetían constantemente. En una larga linea los autos parecían estar detenidos por el tiempo, mis pasos iban hacia adelante y otras veces se detenían, pues éstos se confundían con los susurros que venían de afuera. La palma de mi mano la llevé hacia el bolsillo derecho de mi pantalon y de el saqué una llave. Con algo de aprehensión decidí abrir un auto al azar, uno que se encontraba a mi izquierda; para mi sorpresa la llave funci...

Marco II parte

                              El árbol             En ese momento todo sucedió demasiado rápido, Marco se encontraba en la arena y lo último que recuerda fue la bofetada sin compasión que recibió del que parecía llevar las riendas de ese grupo. El tiempo no era su aliado, y sin embargo solo tuvo un segundo para toser y expulsar la sangre que surgía de su boca.  ¿A  que se debía tal violencia, sin mediar palabra alguna ni juicio, ni oportunidad para expresarse?  -Mi nombre es Baldassare Marco Rossi y no se que hago aquí, hace poco he visto el sol desaparecer y la luna tomar su lugar. -Espetó Marco.  Al parecer el tiempo decidió ser gentil y darle un espacio. Acto seguido levantando un poco el rostro, Marco pudo constatar que un misterio incandescente se escondía tras la violencia desenfadada con la cual había sido abordado hace un instante. Logró descifrar en ...

NUBES DE CRISTAL

                  Aurelio vio pasar las golondrinas que revoloteaban sin cesar y se imaginó ser una de ellas. Fue un momento bonito, pero sin ninguna trascendencia. Tendido sobre la hierba, una vez pasado el revuelo de las golondrinas; cerró los ojos y solo dejó que el sol y el viento, que soplaba ligeramente, hicieran su trabajo. Las nubes que desfilaban, decidieron hacerlo de manera magistral; como si de un espectáculo premeditado se tratase.  De pie, daba vueltas sin cesar, de una forma grácil danzaba y revoloteaba; sintiendo que sus brazos eran alas que expresaban deseo y libertad, a veces levantaba un pie y otras saltaba de un lado a otro como escapando y regresando al punto de partida mas decidido que nunca. De repente, sus rodillas tocaron la hierba y como un arrepentido furioso, se encontró de cara al sol que no era  clemente... Con sus manos arrancó pedazos del césped, y de sus ojos brotaron lagrimas; paralelamente, un soni...

MARCO I PARTE

  El sueño                                                                Al abrir los ojos de un sueño interrumpido a siquiera mitad de la noche, Marco percibió una luz roja que descendía hacia su rostro, era el reloj indicando la hora, eran apenas las 2:34 am y todavía se sentía agotado de la jornada laboral pasada. Intentó rememorar esa pequeña isla rodeada de palmeras en la que una vez estuvo. En un momento dado, Marco quiso estar tocando la arena blanca que cubría dicha isla con sus pies y sentirla entre sus dedos, de hecho, si el hubiese tenido el poder de trasladarse y aparecer directamente allá; sin duda lo hubiera hecho. En el intento de rememorarlo cerró los ojos y llevando su dedo índice y pulgar respectivamente frotó sus párpados y pensó simplemente en aparecer en ese sitio idílico en el que un día...

El día que las flores estuvieron quietas.

El día que las flores estuvieron quietas.                    Fue súper extraño ver que el día anterior Fernando vio caer la noche de repente, así, sin preámbulo, normalmente el tenía su cámara réflex configurada siempre para disparar al ocaso, en los instantes precisos. Pero fue tan súbito que la noche lo abofeteo así nomas.  Sin embargo, el intentó esa noche pensar en algo que escribir y como de costumbre, nada llegaba a el. Solo observó por pequeños instantes y cerró la persiana, pues no quería ni presenciar ni ser partícipe de esa noche tan nula y perdida, y grosera, incluso egoísta pues ni siquiera tuvo el valor de avisarle su llegada.  La luz de la mañana también fue grosera y abrupta en llegar, pero era quizás mas soportable el hecho de saber que sería un nuevo comienzo. Albergar al menos la idea de que todo podría surgir de nuevo. Fue un estúpido al no preparar su cámara y hacerse a la ...